Natación... ya no estamos pa' estos trotes

Pues como teníamos pocas cosas con el Photoshop, el blog, las clases de bajo, las actividades parroquiales, el albergue y cantar con los niños en la misa de La Fresneda,... a Nacho se le ocurrió la brillante idea de iniciar un curso de natación con Clara.

La verdad es que da gusto ver la ilusión con la que Clara va a sus clases y cómo se divierte en el agua. Llevarla a natación requiere un gran esfuerzo por nuestra parte, más que nada por los preparativos y por el horario, que nos viene un poco apurado a todos. No obstante, nos gusta que se vaya familiarizando con el agua para que no le tenga miedo y pueda defenderse ella solita lo antes posible en este medio. El caso es que la famosa caída / resbalón de Nacho, se produjo precisamente en la piscina. Según me ha contado, le dio por echar una carrerina una vez fuera del agua, y... claro!... como ya no tamos pa' estos trotes, pues... bueno!, como que cayó al suelo tan largu como ye. En fin, que yo ahora me río y me imagino cómo se quedarían los espectadores y resto de nadadores. Aún está reciente la otra caída que tuvo en el Albergue Covadonga (suelo muy traicionero) en plena cena con el comedor abarrotado de transeúntes, voluntarios y hermanas. Ésa también me la perdí, pero según me contaron, los transeúntes quedaron descolocados al ver semejante paisanu tirau en medio del comedor. En fin... cosas de Nacho!... qué os voy a contar... que nos fallan los reflejos ;-)