Testigo silbando
Qué dificil es a veces esto de ser cristiano, ¿no?
Se supone que deberíamos ser ejemplo, alegría para todo el que nos rodea y un poco esa sal que da gusto a todo lo que nos rodea. Sin embargo a veces somos todo lo contrario: malhumorados, desesperanzados, cabizbajos, renegados,... Yo estoy especialmente así (vease segundo caso) esta semana. En principio, sin mayores motivos aparentemente... bueno el ambiente laboral no es que ayude mucho, pero tampoco es tan grave como lo fue hace unos cuantos meses. Así que esta semana podría autodenominarme el antitestigo.
Sin embargo en otras ocasiones, las oportunidades de dar testimonio, se presentan sin que te las esperes. Como ejemplo os cuento una que me pasó en uno de mis ambientes diarios.
Se me había metido ese fin de semana esta canción de los Valivan en la cabeza.
De tal modo se me metió, que no podía evitar ir silbándola por los pasillos. En uno de estos paseos alguien escuchó el tema a lo lejos y pensó "No es posible escuchar eso aquí". Esta compañera, que también conocía el tema y su significado, me reconoció que sólo con ese pequeño gesto ya le había alegrado ese lunes, cuyo arranque prometía ser tedioso.Luego aprovechamos para hablar 5 minutinos sobre estos temas.
Así que ya véis, uno nunca sabe cuándo puede ser testigo. A mí esta vez me tocó serlo mediante un simple silbido.
En cuanto al vídeo, una maravilla de canción (yo conocía esta versión) de la que han sacado una nueva versión esta familia de artistas que son los Olguín. A la espera con impaciencia de su nuevo CD de música.
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