Nachelia Arán
Habréis observado que estos días estoy menos activo, en lo que a la actividad "bloggera" se refiere. La causa, es mi nueva tarea de carpintería&bricolage. Me explico.
Como sabéis, cuando nace un bebé, se les suele meter en lo que se llaman minicunas o moisés. No son más que cunas chiquitinas, en la que el recién nacido, no "se te pierde" por la inmensidad de una de tamaño normal. No es algo obligatorio y que te dura poco tiempo (3 o 4 meses), ya que los chavales la dejan pequeña rápidamente, pero sí está bien para tener a la criatura más recogida y poder llevarla de un lado a otro en esos primeros días.
Cuando nació Clara ya habíamos pensado en currarnos una artesanal, pero al final, a través de unos primos de los padre de Eva, nos dejaron una, que cumplió a la perfección su cometido. Así que nos ahorramos un trabajo adicional.
Para la nueva criatura, ya estaba yo dispuesto a repetir la operación de gorroneo y así, en 10 minutinos, un par de tornillos y ¡¡¡Tachánnnnn!!... ¡listo!. Pero no... cosas de mujeres (je je), en esta ocasión, me dijeron que era mejor una diferente, que fuese más del estilo Amelia Arán, así blanquina y a juego con el recién estrenado friso blanco de la habitación. Y yo, que aún siendo asturiano de pura cepa, a veces parezco del mismo Bilbao, pues contesté: "Oye,... que me lanzo y que te hago esa cuna con la chapela y 4 troncos!!" (leer con acento vascuence). Y en eso estamos.
A partir de la foto, me trabajé un pequeño despiece con medidas orientativas, luego al Leroy Merlín a por las tablas y ahora, estamos en pleno proceso de creación, con sus más y sus menos, pero parece que la cosa va tomando forma.
Os iré poniendo algún detalle a medida que avance la "minifaraónica" obra.
Espero llegar al final con un resultado más o menos digno.
0 comentarios:
Publicar un comentario