De Antroxu con Clara

Antes de la anunciada Cuaresma, también hubo un tiempo para disfrutar del Antroxu. Aprovechando que yo tenía puente, me acerqué hasta Gijón en un par de ocasiones, más que nada, para "amortizar" el traje que la güelita había estado cosiendo durante tanto tiempo. Como pudimos comprobar, este año hubo gran abundancia de ratitas, gatitos y gatitas... disfraces que siempre son socorridos para los más pequeñajos. Los "mayores", pasamos un año más, sin pena ni gloria, diciendo que nos íbamos a disfrazar, pero dejándolo para el que viene. La verdad es que yo con mis "revolturas", tampoco tenía mucho ánimo para buscar un atuendo adecuado. Tengo miedo que ni siquiera me entren los que tengo de otros años... mejor no probar!!! ;-)